La alianza junto a la prestigiosa empresa colombiana nace de la necesidad de contar con una infusión de alta calidad, de producción cuidada y reconocimiento mundial, el complemento perfecto para la propuesta deluxe de Joaquín Vasco. A la par de estas novedades, también agregan a su carta jugos naturales de naranja y maracuyá, además de agua mineral y saborizada.
En cuanto a los sabores, hay algunos de edición limitada, como la reciente tarta de café, elaborada con café de Juan Valdéz, la de maracuyá, chocolate blanco o frambuesa. También se encuentra la tradicional de queso y otras variantes: chocolate belga, pistacho y dulce de leche. Cada una de ellas se puede degustar en porciones, en formato joaqui bowl -un recipiente pequeño, ideal para llevar a donde sea- o adquirir piezas enteras.
Cada tarta de este típico manjar de origen español se prepara en dos tamaños: en versión grande de 24 cm, que rinde entre 10 y 12 porciones, y la mediana de 15 cm, que rinde de 5 a 6 porciones. Además de ofrecerlas para consumir en el lugar o para take away, según la disponibilidad también se pueden encargar online y retirar en la tienda.
Cabe destacar que esta reciente acción entre Joaquín Vasco y Juan Valdez Café se desarrolla a meses de la inauguración del nuevo local en Recoleta, donde se brindará el servicio de cafetería, luego de la exitosa primera sucursal en Nordelta, durante agosto pasado. Sus creadores, los empresarios gastronómicos Belén Durañona y Federico Reznick, acercan un producto de primera línea, no sólo a gracias a las materias primas que utilizan, sino también con un packaging de lujo, donde cada tarta se presenta en una caja y bolsa similares a las de una joyería.
Un proyecto de pastelería 100% artesanal, de alta excelencia e innovación que, sin perder la esencia de la tradición española, está en constante evolución.
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